Votar por los animales este 21D

Las elecciones catalanas del próximo 21D han sido apresuradas y responden a condiciones políticas muy tensas. Aunque el discurso está muy polarizado, los animalistas podemos conseguir muy buenos aliados, ya que se ha buscado candidatos en sectores alejados de la política tradicional y la experiencia nos indica que podemos conseguir más objetivos a través de quienes no deben tantos favores a empresarios o partidos políticos tradicionales.

Los grandes temas que nos enfrentamos los animalistas en Catalunya son:

• Abolición de los espectáculos populares con toros, conocidos como correbous.
• Restricción de las zonas donde se permite la caza, generar condiciones más severas para conseguir licencias y buscar alternativas a la caza para controlar poblaciones de animales.
• Fin progresivo de la ganadería intensiva, especialmente de cerdos, en la región. Además, seguir la tendencia europea de eliminar jaulas en todas las producciones.
• Prohibir la venta de animales en tiendas y ferias, además de aumentar el control de los criaderos.
• Mayor control en los centros de acogida de animales de compañía catalanes, para que la eutanasia sólo se aplique en casos justificados por enfermedad o razones humanitarias.
• Apoyar iniciativas que reduzcan la producción y consumo de carne, como ayudas a sectores productivos alternativos y campañas de educación.
• Reconversión progresiva de los zoológicos para adaptarlos a la ciencia y a la ética de nuestra época.
• Fin de los espectáculos con delfines y fin progresivo del cautiverio de cetáceos.
• Fin del uso de todo tipo de animales en espectáculos ambulantes. Actualmente sólo se prohíbe el uso de animales no domesticados o salvajes.

Estas ideas son sólo algunas de una larga lista de demandas pendientes, ajustadas a la realidad política actual. AnimaNaturalis defiende objetivos mucho más ambiciosos, pero sabemos que todo cambio profundo se realiza de manera progresiva y hasta donde la sensibilidad de la sociedad nos permite.

En términos generales, los partidos políticos conservadores tienden a defender las costumbres, tradiciones y los intereses de los empresarios... y precisamente esto es contrario a lo que necesitan los animales. Partidos como el PP, Cs y PSOE/PSC no han demostrado ser muy buenos aliados para nuestro movimiento, pero en ocasiones nos han sorprendido. El caso de Junts per Catalunya (antiguo PDeCat) es especial. Fue uno de los promotores de la prohibición de la tauromaquia en Catalunya, pero por lo general han actuado con mucha cautela en apoyar otras iniciativas. En estas elecciones sus listas están llenas de independientes, por lo que pueden ser una sorpresa.

Por otro lado, los partidos de la nueva izquierda siempre han sido buenos compañeros en las iniciativas de defensa de los animales. Quizás los partidos más animalistas con representación en las instituciones han sido ICV y EQUO, que ahora participan dentro del bloque de Catalunya en Comú-Podem. Podría ser un partido aliado, al igual que las CUP, partido que no ha dudado en rechazar abiertamente los correbous, votando en contra para otorgar los permisos en municipios de Terres de l´Ebre, lo que los convierte en el partido con representación en el Parlament más valiente y comprometido en este sentido.

PACMA será probablemente la mayor fuerza extraparlamentaria en el 21D, ya que siempre ha obtenido sus mejores resultados en Catalunya y este año Units Per Avançar (antigua Unió) va dentro de las listas de PSC. Es un partido con alto reconocimiento de marca, posee un electorado fiel y sólo necesita articular un discurso que pueda seducir a nuevos votantes, más allá del discurso independentista que polariza estas elecciones.

PP

El Partido Popular  ha destacado por no apoyar ningún avance para los animales, y ha intentado hasta el límite hacer retroceder algunas medidas, como la prohibición de las corridas de toros en Catalunya o votando en contra de la ley catalana que prohíbe el uso de animales salvajes en los circos. Hay que hacer un esfuerzo muy grande para interpretar algunas de sus acciones como benéficas para el medio ambiente y los animales.

También hay que recordar que su cabeza de lista, Xavier García Albiol, mantuvo el último espectáculo con vaquillas que existía en la provincia de Barcelona mientras fue alcalde de Badalona, a pesar de la oposición política y social en la ciudad.

Cs

Si bien algunos políticos de Ciudadanos han apoyado medidas como la prohibición de animales salvajes en circos en otras partes de España, por regla general no han liderado ninguna medida para beneficiar a los animales ni han puesto fácil su aprobación por otros grupos parlamentarios. En los debates que hemos presenciado en Catalunya, se esmeran en bloquear iniciativas o ponerle condiciones imposibles. Al ser un partido a la derecha del espectro, privilegia a los empresarios por sobre cualquier otro grupo social, y si el bienestar animal se pone en el camino del beneficio económico, su posición se hace muy clara.

Partido Socialista de Catalunya (PSC)

Tradicionalmente los socialistas no han sido un partido muy amigo de los animales, aunque ahora con Cristina Narbona como presidenta podría notarse el cambio. Ella es abiertamente contraria a la tauromaquia, luchadora contra el calentamiento global, y defensora de una profunda reforma de las granjas industriales. Sin embargo, para el PSOE/PSC, son las corporaciones las que parecen tener mayor poder dentro de la formación. Se encuentran cómodos en las contradicciones y las promesas no cumplidas. Nos ha sorprendido su programa electoral en cuanto a derechos de los animales se refiere, pues dedica varios apartados muy interesantes y ambiciosos, quizás demasiado ambiciosos para una formación que tiende a ser moderada y conservadora. Concretamente expresan la voluntad de posicionarse de manera clara en la defensa de los animales como seres con capacidad de sufrir, sentir miedo y sufrir ansiedad. Aseguran que fomentarán “la erradicación de la violencia y el maltrato de los animales en todas sus expresiones”. Ahora quedará ver hasta dónde llegarán con tan ambicioso programa que, sin duda, les marca un camino claro y comprometedor.

En una reciente entrevista en RAC1, el cabeza de lista y líder de PSC, Miquel Iceta, declaraba lo siguiente: "No queremos que vuelvan los toros, pero los correbous son una excepción cultural en que ellos mismos deben garantizar que los animales sufren el mínimo. Yo voté en contra de la prohibición de los toros pero ahora no reabriría el debate".

Junts per Catalunya (PDeCat)

Difícilmente podemos imaginar que algunas medidas que ayuden a los animales nazcan de el PDeCat, pero podría apoyarlas sin demasiado problema si no afecta a economías locales. No es imaginable que lideren reformas que beneficien a los animales en granjas ni que apoyen la prohibición de espectáculos crueles con animales. Su postura frente al problema de los correbous es muy conservadora.

Sus listas han sido formadas casi exclusivamente con independientes, provenientes del mundo de la cultura y académico. Gratamente nos encontramos en su lista por Barcelona con la veterana defensora de los animales Magda Oranich y con Anna Mulá, abogada experta en defensa animal. Y podemos destacar también a uno de los mayores aliados que tuvo la prohibición de la tauromaquia en Catalunya, Josep Rull. En su programa electoral se incluye un apartado acerca de Medio Natural, donde se puede leer en su último compromiso: "consolidar y avanzar en materia de protección animal".

Catalunya en Comú -  Podem

Esta es una de las formaciones políticas con representación parlamentaria que más defiende los intereses de los animales y medio ambiente. En múltiples ocasiones en el Parlament, Congreso y Parlamento Europeo han defendido medidas de protección animal o para eliminar las tradiciones más crueles con los animales. Formaciones como ICV y EQUO son las únicas que incluyen desde hace años compromisos muy interesantes por los animales.

Su programa electoral incluye todo un apartado titulado “Defensa de los Animales”. En él se incluye presionar para que las competencias en protección animal sean exclusivas de la Generalitat, sin que deban subordinarse a los intereses del estado español. Además, quieren impulsar la creación un Consejo Asesor de Defensa de los Animales. También indica que desea prohibir el uso de animales en todo tipo de espectáculo fijo o itinerante, festejos populares y circos, así como exhibiciones de delfines y orcas. Incluye una fuerte regulación de la caza que priorice la protección de animales y personas. Promete grandes avances en los derechos de los animales de compañía.

Esquerra Republicana de Catalunya (ERC)

Las encuestas indican que probablemente esta formación consiga la primera mayoría en las elecciones. Cuando se realizó el debate contra las corridas de toros en Catalunya, fue Esquerra Republicana de Catalunya quien impuso la excepción de los correbous en la prohibición. ERC ha demostrado que más allá de las Terres de l´Ebre, en el resto de Catalunya se muestra claramente más sensible contra el maltrato animal y no se ve tan afectado por las presiones por parte de las peñas taurinas de los pueblos. Han apoyado y en ocasiones incluso impulsado mociones para poner fin a los correbous, en municipios como Badalona, Olot, Roses, etc. Todo indica que podrían ser muy buenos aliados para los animalistas en la región, aunque ahora mismo sus prioridades están puestas en darle continuidad al procès catalán.

En su lista nos encontramos con nombres que siempre han sido paladines del movimiento animalista español y europeo, como Raül Romeva.

Su programa electoral apenas hace una breve mención a los animales, en forma de titular dentro del apartado medio ambiente y sin detallar propuestas: “Protección de los animales en que no se permitan situaciones de maltrato y sufrimiento”.

CUP

Es una formación intensamente de izquierdas, apasionada e intrépida. Su sensibilidad ante las tradiciones crueles con animales y otros espectáculos es muy grande, y podrían ser buenos aliados para realizar cambios profundos en la ganadería intensiva, transporte de animales vivos y otras medidas de bienestar animal. Muchos de sus líderes se han posicionado abiertamente contra los correbous y en la administración local han apoyado muchas iniciativas de protección animal.

Su programa electoral incluye un apartado específico titulado: “Por una república que defienda los derechos de los animales”, en el que propone prohibir los correbous y otros espectáculos que impliquen maltrato animal, poner fin a los zoológicos, prohibir la venta de animales en las tiendas, reducción de las explotaciones de ganadería intensiva y apostar por las extensivas, eliminar la caza por motivos de ocio, entre otras propuestas.

PACMA

Por supuesto, el partido animalista es la formación más comprometida con la causa de los animales entre todas las que compiten por un espacio en el Parlament. Su mejor votación en las últimas elecciones estatales fue en la provincia de Barcelona, con 1,8% del total y en las autonómicas de 2015, obtuvo 29 mil votos (0,73%). Según la ley electoral, eso no es suficiente para ser considerado en la repartición de escaños (requiere un mínimo de 3%), pero es un resultado muy bueno que le permitiría negociar con alguna formación amiga para presionar por medidas, puesto en las listas o por algún cargo en la administración pública. Sin embargo hasta el momento PACMA nunca ha accedido a pactar con otros partidos. Su programa es muy completo y sería interesante verlo defendido en el Parlament, aunque en una elección tan polarizada como esta es muy difícil imaginar que haya sorpresas.

Si logran movilizar el voto de quienes no suelen participar en las elecciones, podrían conseguir que Ana Bayle fuera su primer cargo electo. La Ley d'Hondt no nos permite hacer proyecciones exactas, pero si jugamos con la calculadora, con conseguir el 3% de los votos podrían acceder a uno o dos escaños, si los demás partidos mantienen la proporcionalidad que les están dando las últimas encuestas y el voto en blanco se mantiene en el 0,5%.

Otros escenarios para que consiguiera su primer cargo electo es que se cambie la Ley Electoral y permitiera una única circunscripción por Comunidad Autónoma, en lugar de que el reparto de escaños sea a nivel provincial. De esta manera, con los mismos resultados de 2015, hubiera conseguido un sillón. También está la posibilidad de sumarse a alguna coalisión, cosa a la que ha sido invitado en Catalunya en más de una ocasión.