Los grupos parlamentarios de la CUP y En Comú Podem registraron el pasado 7 de abril de 2022 en el Parlament de Catalunya una proposición de ley para eliminar las modalidades más agresivas de 'correbous'. La propuesta planteaba modificar la Ley 34/2010, del 1 de octubre, de regulación de las fiestas tradicionales con toros, eliminando tres modalidades del segundo artículo de la norma, concretamente la modalidad del toro embolado, el toro ensogado y el toro en la playa.
De los 450 actos con toros que se hacen cada año en Cataluña, aproximadamente 160 son toros embolados y una cincuentena son toros ensogados.
Desde Prou Correbous estamos en contacto con los diferentes grupos parlamentarios para asegurar que al próximo pleno de miércoles 25 de octubre se rechace la enmienda de PP y VOX, los únicos grupos que han presentado enmiendas a la totalidad contra la proposición de ley impulsada por la plataforma y presentada por En Comú Podem y CUP para eliminar los toros embolados, los toros ensogados y los toros en la playa.
Las modalidades más crueles
Los toros en la playa hace muchos años que ya se dejaron de celebrar por problemas sanitarios, y los toros a la mar se dejaron de celebrar después de que el Juzgado de lo contencioso-administrativo número 1 de Tarragona ordenara en la Generalitat abrir un expediente sancionador en los organizadores de los toros a la mar celebrados en l'Ampolla (Baix Ebre) el verano del 2013 por maltrato animal y vulneración de la normativa, puesto que los toros a la mar no están regulados por la ley, a pesar de que se trataba de una modalidad que se realizaba anualmente al puerto de este municipio y también en las Casas de Alcanar. Se trataba de hacer caer los toros al agua para rescatarlos desde una embarcación con una soga ligada en el cuello o a los cuernos y volver el animal a tierra firme para continuar con el espectáculo.
Uno de los objetivos históricos de las entidades de protección animal en Cataluña ha sido la de acabar con los toros embolados, por la extrema crueldad a la que son sometidos. En esta modalidad se ata a los animales y se los inmoviliza de forma brutal contra un pilón de madera.
Es muy habitual que durante el embolada el toro sufra caídas, bruscas estribadas en la cabeza, o que el animal se enrede con la cuerda, quedando inmovilizado por las patas o mal situado frente al pilón, con lo que el proceso muchas veces acaba siendo todavía más largo y angustiante para el animal. Una vez inmovilizado, se le sujeta a los cuernos unos herrajes de metal y en los extremos se colocan unas bolas impregnadas con una sustancia inflamable, capaz de mantener el fuego encendido durante un tiempo prolongado de unos 20 minutos. A continuación se prenden con fuego estas bolas y se corta la cuerda que lo sujeta, para que el toro sea incitado a embestir en plazas portátiles o por calles delimitadas del pueblo.
Embolar un toro puede poner en riesgo la vida de estos animales, además de implicar lesiones físicas y estrés. Una parte de estos animales son directamente enviados al matadero después del espectáculo, puesto que a veces las peñas taurinas compran toros salvajes y después del espectáculo son enviados al matadero.
Otra modalidad polémica, aunque mucho menos numerosa, es la del toro ensogado, que consiste en la suelta de un toros con dos sogas ligadas alrededor de su cabeza para poder controlar sus movimientos y embestidas. El sufrimiento en esta modalidad se acentúa por el agotamiento de los toros, al ser llevados hasta los límites de su capacidad aeróbica durante aproximadamente 30 a 50 minutos. En todos los festejos se puede apreciar como, al poco rato de empezar, los animales recurren a la respiración abdominal con la boca abierta, la lengua fuera y una profusa salivación. En muchas ocasiones, los toros no logran terminar el recorrido, y el camión tiene que ir a buscarlos. El calor de los meses de verano, el hambre y la sed agudizan su sufrimiento, hasta tal punto que a veces han llegado a morir toros dentro de los camiones, o no han podido aguantar el recorrido hasta el final, quedando exhaustos y negándose a avanzar.
Esperanza de que la propuesta siga su curso parlamentario
El Parlament ya aprobó en septiembre de 2019 una propuesta de resolución de los comunes que pedía en el Gobierno el fin de los correbous en Cataluña. La iniciativa fue aprobada con 50 votos a favor, 17 en contra y 61 abstenciones. JxCat, PSC y ERC dieron libertad de voto a sus diputados y la CUP no participó en la votación porque abandonó el pleno después del encarcelamiento de siete miembros de los CDR. Sin embargo, con el cambio de gobierno, esta propuesta se quedó en el camino.
Desde las entidades de Prou Correbous confiamos en que la enmienda de PP y VOX no saldrá adelante, puesto que aprobarla significaría vetar un debate sano y necesario, y porque además, en el supuesto de que la proposición de ley finalmente fuera aprobada, no vetaría la totalidad de los correbous en Cataluña, sino solo las modalidades más violentas y peligrosas.
Estaremos presentes en el hemiciclo representantes de las entidades, incluida Tots Som Poble, asociación de vecinos y vecinas de Amposta, constituida en 2019 para visibilizar el sector de la sociedad ebrense que rechaza el maltrato animal y el secuestro de las fiestas por parte de las peñas taurinas.
Las entidades que formamos el grupo coordinador de la plataforma Prou Correbous somos ADDA, AnimaNaturalis, FAADA, Fundació Fauna, Fundación Franz Weber, Lex Ànima, Libera! y Tots Som Poble.
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