Hace unas semanas, AnimaNaturalis presentó Granjas.org, una nueva línea de investigación enfocada a desvelar las condiciones de vida de los animales en las granjas.
En esta ocasión, el equipo de investigación de AnimaNaturalis pone el foco en las granjas de conejos, para mostrar la terrible realidad que viven en todas las etapas de su vida, desde que nacen hasta que son enviados al matadero.
En la UE no existe una normativa específica para la explotación de conejos
Aunque los conejos son la tercera especie más producida para carne en Europa, con cerca de 180 millones de individuos cada año, no existe una normativa específica para la explotación de conejos, por lo que empresarios y ganaderos se rigen por la legislación general de la Unión Europea sobre bienestar animal, que únicamente define algunos aspectos básicos como la disponibilidad de agua, comida y prevención de enfermedades.
Durante la investigación, hemos comprobado cómo los conejos viven amontonados en jaulas con suelo de alambre, sin ningún tipo de enriquecimiento y en un espacio inferior al tamaño de un folio por animal. En estas jaulas no pueden desarrollar comportamientos naturales como serían correr, saltar o roer. Los mismos tipos de jaulas se utilizan para conejos de engorde, hembras preñadas y sus crías.
Las madres reproductoras son inseminadas artificialmente y embarazadas 8,5 veces en un mismo año. Luego son enviadas al matadero, aunque su esperanza de vida podría llegar hasta los 12 años.
Los gazapos son destetados a los 32 días, y enviados al matadero un mes después, pero el 9,45% morirán durante la lactancia y un 10,35% morirán durante la fase de engorde.
España es el país con mayor consumo de carne de conejo de la UE
Más de la mitad de las granjas de conejos en la UE se encuentran en España, con cerca de 3.833 explotaciones cunícolas, según el Registro de Explotaciones Ganaderas (REGA). Cataluña es la comunidad autónoma que más explotaciones tiene registradas de todo el país. En España, 38.548.000 conejos fueron al matadero en 2021.
El consumo per cápita de carne de conejo en España es del orden de 0,95 kilos por persona y año, una cifra considerablemente baja si se compara con la del consumo de otras carnes como el porcino o las aves. (ASECU, Asociación Española de Cunicultura). Aún así, España es el país con mayor consumo de carne de conejo de la UE, y el segundo en consumo per cápita, después de la República Checa y seguido por Italia.
Existe una progresiva desafección en el consumo de carne de conejo en España y, en general, en todos los países de la UE, pero aún así sigue siendo de los países que más la consumen. Esto sucede por el elevado precio, y porque cada vez con más frecuencia, se tiende a considerar al conejo como un animal de compañía. En Italia, por ejemplo, se presentó en 2015 un proyecto de ley en el Senado para prohibir su uso como alimento, aunque no llegó a prosperar.
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