En 2020, destapamos el caso de una banda del barrio de Canyadó de Badalona, que practicaba rituales de santería en los que se sacrificaban decenas de animales cada semana.
El caso fue puesto en conocimiento de la Guardia Urbana, que pudo interrumpir in extremis el sacrificio de trece animales, entre los que se encontraban un gallo, nueve gallinas y tres codornices. Los agentes entraron en el portal justo detrás de los imputados, a quienes decomisaron los animales vivos, metidos en cajas de cartón.
Un equipo de investigación de AnimaNaturalis llevaba un año siguiendo la pista a la banda, pero debido a la pandemia y el confinamiento, tuvimos que posponer las guardias en la calle, con el objetivo de reunir suficientes pruebas gráficas e identificar un patrón que les permitiera anticipar cuándo iba a ser el próximo sacrificio y así, pillarlos con las manos en la masa, esta vez, en colaboración con la Guardia Urbana.
“Hicimos varias esperas, hasta que un día logramos ver cómo salían del portal dos hombres cargados con bolsas de basura”, relata Aïda Gascón, directora de AnimaNaturalis. “Tiraron las bolsas al contenedor, y cuando se fueron nos metimos dentro.Los cuerpos de los animales, aún calientes, estaban decapitados”.
Durante la investigación encontramos bolsas de basura que contenían varias gallinas y gallos decapitados y un cabrito degollado.
Desde AnimaNaturalis nos personamos como acusación popular, con el fin de pedir la pena más alta, que podría ser de seis a dieciocho meses de prisión por los delitos que se les imputan contra el maltrato animal con el agravio de muerte. Durante la fase de instrucción, los acusados reconocieron que llevaron a cabo sacrificios sin aturdimiento previo, seccionándoles la cabeza y dejando que se desangraran hasta la muerte.
Tras el escrito de acusación del ministerio Fiscal, en el que se solicitaba la apertura de juicio oral, únicamente a dos de los implicados y el sobreseimiento provisional de los otros dos, hemos conseguido que el juez proceda a la apertura de juicio oral de todos ellos, como presuntos responsables de varios delitos de maltrato animal.
Ya al inicio del procedimiento, el juez de instrucción acordó el sobreseimiento provisional y el archivo del procedimiento, al entender, desde su perspectiva, que ninguno de los animales que fueron víctima del maltrato, quedaban protegidos por el Código Penal, ni constaba un resultado lesivo concreto.
Ante tal apreciación desde AnimaNaturalis interpusimos un recurso de reforma argumentando que el artículo 337 del Código Penal es aplicable a todos los animales exceptuando a los silvestres que se encuentran en estado salvaje, por lo que las víctimas de este caso sí se encontraban bajo la protección de mencionado artículo.
El recurso fue estimado reconociendo las argumentaciones. Sin embargo, más adelante, el Ministerio Fiscal únicamente reconocía actividad criminal por parte de los dos implicados que portaban las cajas con las aves, solicitando su condena por tres delitos de maltrato animal y cinco delitos de maltrato animal con resultado de muerte. Sin embargo, la Fiscalía solicitaba la absolución de las otras dos personas también implicadas.
Desde AnimaNaturalis, teníamos indicios contundentes que apuntaban a la comisión del delito de maltrato animal por parte de las cuatro personas implicadas en el caso, de manera que formulamos ante el juez un escrito de acusación contra todos ellos, solicitando que debían ser juzgadas como tal.
Recientemente el juez se ha pronunciado mediante un auto en el que, efectivamente, ordena la apertura de juicio oral contra los cuatro acusados, por un delito continuado de maltrato animal con resultado de muerte y ocho delitos de maltrato animal, cinco de ellos con resultado de muerte.
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