La voz de la sociedad española ha resonado con fuerza: la Iniciativa Legislativa Popular (ILP) “No Es Mi Cultura” ha entregado 715.606 firmas —un 42% más de lo requerido— para exigir la retirada de la tauromaquia como patrimonio cultural. Este hito, uno de los más contundentes en la historia de las ILP en España, no solo supera las 500.000 rúbras necesarias, sino que eclipsa por decenas de miles a la iniciativa que años atrás blindó los festejos taurinos. Un mensaje claro: el rechazo a normalizar la violencia animal como tradición es ya imparable.
El 17 de febrero quedará marcado como el día en que la compasión se convirtió en acción. Miles de personas, desde Barcelona hasta Granada, y desde La Rioja (con un respaldo del 5.40% de su censo) hasta Madrid, alzaron su voz. Cataluña lideró con 155.774 firmas, seguida por la Comunidad Valenciana (119.578) y Madrid (102.857), demostrando que el clamor trasciende geografías e ideologías. Incluso en regiones con arraigo taurino, como Navarra y Asturias, el apoyo fue significativo (3.87% y 3.33%, respectivamente).
La lista de respaldos incluye figuras clave: desde Yolanda Díaz, Ione Belarra y Ada Colau hasta Rosa Montero y Carlos Bardem, junto a colectivos como bomberos de Madrid y influencers como Arkano. El mismo momento de la entrega de firmas, estuvieron presentes representantes de Sumar, Podemos, ERC y Junts, mostrando su apoyo a la Iniciativa. “Estas firmas no son solo un número: son la voz de una sociedad que rechaza que la tortura de un animal sea protegida en nombre de la cultura”, subrayó Aïda Gascón, directora de AnimaNaturalis en España y parte de la Comisión Promotora de la ILP.
¿Qué sigue ahora?
Tras la entrega, la Oficina del Censo Electoral tendrá hasta seis meses para validar las firmas. Una vez confirmadas, la propuesta llegará al Congreso, donde se debatirá la reforma de la Ley 18/2013. El objetivo es claro: eliminar la tauromaquia del artículo que la declara patrimonio cultural, devolviendo a municipios y autonomías la potestad de prohibirla.
Pero el camino no será fácil. Aunque el respaldo ciudadano es abrumador, el proceso legislativo exige una intensa labor de cabildeo político. “No es solo una cuestión animalista, sino de coherencia democrática”, insistió Gascón. El reto mayor: convencer a partidos como el PSOE, tradicionalmente vinculados a sectores taurinos, de priorizar la ética sobre intereses minoritarios.
Este triunfo es un primer paso, pero la verdadera prueba está por venir. Para que las 715.606 firmas no se diluyan en los pasillos del poder, es crucial mantener una campaña de presión política independiente y transversal. “Nuestra lucha no es partidista: es un compromiso ético”, recalcó Gacón.
Aquí es donde tu papel sigue siendo vital. Así como más de 2.000 fedatarios recogieron firmas bajo la lluvia y el sol, ahora necesitamos recursos para sostener reuniones con grupos parlamentarios, movilizar abogados expertos y generar contenido que mantenga el tema en la agenda pública. Organizaciones como AnimaNaturalis ya trabajan en esta fase, pero cada aporte económico multiplica nuestra fuerza.
Únete al este sueño
Mientras países como Colombia han rohibido ya las corridas de toros y en México avanza para declararlas ilegales, España no puede quedarse atrás. El 72% de la ciudadanía, según el Eurobarómetro, rechaza usar fondos públicos en tauromaquia. Este movimiento no solo defiende a los animales, sino que refleja una sociedad que exige evolucionar hacia una cultura basada en la empatía.
“Cada firma es un grito contra la impunidad de la tortura animal”, declaró Gascón durante la entrega el pasado lunes 17 de febrero. Hoy, ese grito debe convertirse en ley. Si crees, como nosotros, que la verdadera cultura no duele, suma tu voz a la siguiente etapa. Apoya el trabajo de AnimaNaturalis y hazte socio o comparte nuestra causa. Los toros tienen prisa; su libertad depende de que no bajemos la guardia.