AnimaNaturalis y CAS International hemos documentado los tradicionales toros ensogados de Teruel, uno de los actos de maltrato animal más destacados de su programa de fiestas.
Esta modalidad consiste en hacer correr al toro por las calles de la ciudad con cuerdas atadas a la cabeza y puede tener una duración de hasta 50 minutos. Los animales son rodeados por la muchedumbre, que los acosa y hostiga durante todo el recorrido entre la plaza de toros y los corrales, sufriendo altos niveles de estrés.
El lunes 11 de julio, con motivo del cierre del programa de la Vaquilla, nuestro equipo de investigación encubierta ha documentado este cruel festejo en el que se han utilizado un total de seis toros y que la propia alcaldesa considera una de “las señas de identidad” de Teruel.
La polémica ha surgido debido a la ausencia de los becerros y vaquillas en la modalidad infantil, que este año se ha visto restringida por un vacío legal. Los astados fueron sustituidos a última hora por carretones para cumplir con la normativa autonómica sobre festejos taurinos, que no autoriza la participación de menores de 16 años en este tipo de espectáculos.
El concejal de fiestas del Ayuntamiento de Teruel, Javier Domingo, ha lamentado este cambio y ha manifestado que espera poder retomar la fiesta con astados reales en 2023. “Queremos seguir trabajando para que la normativa autonómica en cuanto a los espectáculos taurinos se modifique, tal y como se comprometieron desde el Gobierno de Aragón”.
También el Partido Popular ha propuesto una modificación en el reglamento taurino de 2001 para permitir la presencia de menores que se “adapte a los tiempos actuales”, mientras que la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, ha insistido en que la tauromaquia forma parte de la cultura del territorio y que, por tanto, “hay que introducirla desde muy pequeños”.
Ayúdanos a acabar con este maltrato a los animales y firma nuestra petición www.fiestascrueles.org.
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