Exigimos detener proyecto de granja de pulpos de Nueva Pescanova ante revelaciones de riesgos ambientales y de salud pública

AnimaNaturalis y sus aliados europeos Eurogroup for Animals, Compassion in World Farming, Eko, Acción Océanos y la Fundación Jane Goodall , exigimos a la empresa Nueva Pescanova a detener inmediatamente el proyecto, argumentando que, además de causar crueldad hacia los pulpos, la granja contradice sus propias afirmaciones de sostenibilidad corporativa. Entre las preocupaciones está que la granja podría amenazar a delfines y tortugas cerca del sitio, y sus descargas podrían contribuir a la contaminación local del agua y a las emisiones de CO2. La probabilidad de estos impactos fue considerada "significativamente alta" por el Gobierno de Canarias.

El sitio web de la empresa afirma que está comprometida con "mantener la biodiversidad", "proteger el ecosistema" y "promover la economía circular". Sin embargo, su propio informe ambiental para la granja en el Puerto de Las Palmas, Gran Canaria, fue considerado insuficiente por el Gobierno de Canarias debido a preocupaciones de que los planes podrían:

• Amenazar la vida silvestre local, incluidos los cetáceos protegidos (delfines y marsopas) y las vulnerables tortugas marinas, debido al ruido y la contaminación del agua debido a su proximidad a un Área Marina Protegida (AMP).

• Representar un riesgo para la salud pública al utilizar agua marina cercana que no tiene la calidad suficiente para ser utilizada en la producción de alimentos para humanos.

• Causar contaminación, incluidas emisiones de CO2, preocupaciones por olores y vertidos que podrían contribuir significativamente a las ya altamente contaminadas aguas del puerto.

• Amenazar una especie protegida de alga, la cystoseira, que está presente en los alrededores.

• Involucrar prácticas altamente insostenibles como el uso de peces silvestres como alimento y el alto consumo de energía de la instalación.

Hablando en nombre del equipo de expertos legales de Legal Natura que examinaron los documentos, la abogada María Ángeles López Lax dijo: "El informe ambiental de Nueva Pescanova fue inadecuado, carecía de información básica para permitir que el Gobierno evaluara el impacto de la granja en el medio ambiente y la salud pública. Depende de la empresa demostrar que la granja no tendría impacto en especies protegidas o que no representaría un riesgo para la salud pública antes de que se pueda otorgar el permiso, sin embargo, la empresa no ha abordado ni siquiera las preocupaciones más básicas al respecto".

Los pulpos son criaturas únicas, inteligentes, naturalmente solitarias y no están adaptadas a las condiciones de hacinamiento que son típicas de las granjas industriales. Esto aumentaría la agresión y en última instancia podría llevar al canibalismo. Además, son carnívoros, lo que significa que necesitan ser alimentados con peces silvestres en cautiverio, una práctica insostenible que ejercería presión adicional sobre poblaciones de peces ya sobreexplotadas.

"Nuestra sociedad debería estar en un momento de progreso hacia un tratamiento más empático y compasivo de los animales",* declara Ibáñez. *"Si esta aberración continúa, a pesar del rechazo de la comunidad científica y de gran parte de la sociedad, nos enfrentaremos a una grave ruptura de estos valores", expresa Cristina Ibáñez, coordinadora de campaña de AnimaNaturalis.

Compassion in World Farming lanzó su informe Octopus Farming: A Recipe for Disaster en 2021, revelando evidencia científica de que la cría de pulpos sería tanto cruel como dañina para el medio ambiente. Hace un año, Eurogroup for Animals lanzó Uncovering the Horrific Reality of Octopus Farming, su respuesta conjunta a los planes de Nueva Pescanova de criar alrededor de un millón de estos animales inteligentes y únicos en una granja acuática anualmente.

La crueldad hacia los pulpos no es el único motivo de preocupación. La granja, ubicada en el Puerto de Las Palmas, Gran Canaria, plantea serios riesgos para la biodiversidad marina y la salud pública. Los expertos advierten que la proximidad a un Área Marina Protegida podría amenazar a especies como delfines y tortugas, mientras que las descargas de la granja podrían contribuir a la contaminación del agua y las emisiones de CO2.

Los pulpos, criaturas solitarias e inteligentes, no están adaptados a las condiciones de hacinamiento de las granjas industriales. El proyecto no solo aumentaría la crueldad hacia estos animales, sino que también sería ambientalmente insostenible. "Es injustificable introducir este nuevo tipo de granja industrial", enfatiza Keri Tietge, Oficial de Políticas de Animales Acuáticos en Eurogroup for Animals. "Merecemos algo mejor que la continua devastación ambiental para llenar los bolsillos corporativos, y estos increíbles animales merecen algo mejor que vidas reducidas a confinamiento y sufrimiento".

La Dra. Elena Lara, bióloga marina y Gerente Senior de Investigación en Compassion in World Farming, declaró que "no solo esta granja de pulpos causaría crueldad hacia estos animales naturalmente solitarios e inteligentes y sería ambientalmente insostenible, también es hipócrita que Nueva Pescanova promueva planes que contradicen sus propias afirmaciones de sostenibilidad corporativa".

La campaña #BanOctopusFarming ha ganado apoyo internacional y ciudadanos de todo el mundo se están uniendo para detener este proyecto catastrófico antes de que sea demasiado tarde. Desde la AnimaNaturalis, invitamos a todo el mundo a sumarse a la causa y a firmar la petición en banoctopusfarming.org para instar a Nueva Pescanova a detener sus planes de construcción de la granja de pulpos.

"Está en nuestras manos. Detengamos la granja de pulpos y protejamos nuestro océano y los animales que lo habitan antes de que sea demasiado tarde. Juntos, podemos marcar la diferencia y asegurar un futuro más sostenible para todas las criaturas que comparten nuestro planeta", dice Ibáñez.