El pasado domingo 7 de julio, Godelleta, un pequeño municipio de la Comunidad Valenciana, fue escenario de un trágico incidente durante una de sus tradicionales festividades taurinas. A las 9 de la mañana, un toro ensogado fue liberado para correr por las calles del pueblo. En un momento de la carrera, los jóvenes tiraron de la cuerda justo cuando el toro comenzaba a correr, provocando que el animal resbalara y se rompiera un cuerno. El toro empezó a sangrar abundantemente y a gemir de dolor, llenando la calle de sangre mientras intentaba levantarse, sin éxito, ya que los jóvenes seguían tirando de la cuerda.
El toro, tras mucho sufrir, fue finalmente introducido en un contenedor y luego en un camión de transporte de ganado. Rara vez estos animales son atendidos por veterinarios, sino que se procede a su sacrificio por no tener más uso en este tipo de festejos. Lo normal es que se les aisla y luego, retira para ser descartados en algún matadero.
Desde AnimaNaturalis y CAS International, animamos a la ciudadanía a enviar esta carta dirigida a la alcaldesa de Godelleta, María Amparo Pardo Luján (PP), en la que denuncia los hechos y solicita el cese de estas festividades. La presión social y el coraje de testigos de este tipo de crueldades, son las únicas herramientas que tenemos ahora mismo para evitar que hechos como este se repitan.
Este accidente no es un caso aislado, sino un lamentable ejemplo de los peligros y el sufrimiento que estos animales enfrentan durante las fiestas populares en España. Las imágenes del toro ensangrentado han provocado una oleada de indignación entre defensores de los derechos de los animales y ciudadanos sensibilizados con el bienestar animal.
