Parra cazará toninas de más “por si acaso” siguen muriendo

Valencia, Venezuela. El alcalde Edgardo Parra vuelve a sorprender con sus comentarios contra las toninas, pero esta vez llegó al límite de lo soportable.

El primer funcionario de Valencia dijo a los medios de comunicación que se traerá “6 toninas del río Apure, por si acaso".  Y para rematar el disparate argumentó que "el viaje de Apure hasta acá (Valencia) es un procedimiento delicado y tenemos que tomar nuestras medidas".

Estas declaraciones dan un claro entendimiento; van a morir más toninas, incluso las nuevas que traerán. Además, reconoció que “la capacidad del acuario en este momento, comprobada científicamente, es de cuatro toninas".Parra recalcó que está próximo a solicitar autorización ante el Ministerio del Ambiente para la captura de los cetáceos, dentro de un mes, aproximadamente, cuando se hayan concluido los trabajos de rehabilitación del acuario.

El viernes 15 y el lunes18 de abril las organizaciones Asoguau y AnimaNaturalis respectivamente presentaron oficios ante el citado ministerio con la finalidad de recibir audiencia y presentar los argumentos del por qué es inapropiada la solicitud del alcalde, así como entregar las firmas de los ciudadanos que repudian la captura de cetáceos. 

Estas organizaciones también recurrirán a la Comisión de Ambiente de la Asamblea Nacional, y así invitar nuevamente al poder legislativo a que no sólo interceda en el caso, sino que dicte leyes para impedir futuras peticiones similares.

A propósito de las experticias forenses sobre la muerte de 4 toninas, el alcalde señaló que corresponderá a la Fiscalía del Ministerio Público y al Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas determinar las causas de muerte de Ulises, Artemis, Penélope y Helena.

“Hice lo que tenía que hacer. Cambié la junta directiva y ahora está un equipo ahí haciendo las cosas que debieron hacerse hace mucho tiempo, para evitar que se sigan muriendo las toninas y dejar listas las instalaciones para traernos otro grupo desde el río Apure", expuso Parra.

También señaló que el estado de salud de Dalila y Zeus es "estable", de allí que se les permitirá a algunos visitantes acceder al área donde se encuentran estos cetáceos, de manera que puedan disfrutar de sus habilidades.

Hacemos un llamado a la colectividad: NO ASISTAN AL ACUARIO DE VALENCIA. Ir a sus instalaciones significa ser cómplices del encarcelamiento absurdo de animales.

Datos de Interés

Aclimatación

La “aclimatación” consiste en que, ya en la orilla donde permanecen encerrados, se les obliga a comer pescado de la mano del hombre. Este proceso es el boleto sin retorno a una vida de encierro y sumisión, ya que a partir de aquí siempre dependerán del ser humano para poder alimentarse. Así se podrá mantener el control sobre ellos por medio del hambre.

Una vez hambrientos se han rendido y aceptan comer pescado muerto, el entrenador les enseña que solamente cuando llevan a cabo el comportamiento y guión deseados (saludar al público o caminar sobre su cola) reciben pescado como recompensa. Así es como se fuerzan los comportamientos antinaturales de los delfines.

Deberán acostumbrarse a una manipulación y control absolutos, de tal forma que todas sus actividades serán controladas por el hombre.

Transporte

Tras permanecer unos días en los corrales o tanques citados, son transportados por tierra o avión en contenedores a su destino final. Se ha demostrado que el transporte es el proceso más estresante para los delfines, después de la captura.

Alrededor del cincuenta por ciento de los animales capturados no llegan vivos a sus destinos. Muchos animales destinados a parques marinos han muerto poco después de ser transportados. Se reportaron brotes de enfermedades infecciosas en ellos.

Fuente: Leviathan, Center for Marine Mammals Research.

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