Los cazadores de toda España han visto esto como una gran oportunidad y se están acercando a Épila. Con la triste y ya conocida excusa de considerar a estos inocentes animales como una plaga, el Ayuntamiento anunció la semana pasada que pagará 0,70 euros por pieza abatida. Decenas de cazadores de toda España están llegando a Épila atraídos no tanto por el dinero sino por la abundancia de animales que van a poder asesinar.
Se van a distribuir por las 20.000 hectáreas del coto a unas 30 cuadrillas de cazadores que se han puesto en contacto con el Ayuntamiento a raíz del anuncio. Hasta ahora, un fin de semana normal no salían más de tres. Se está llamando a gente para venir también entre semana.
Con esta medida, en Épila esperan acabar este año con entre 40.000 y 50.000 conejos. Hasta ahora se mataban unos 20.000 animales.
Los conejos crían con especial tranquilidad en los taludes de la vía del AVE y de la autovía, ya que allí no está permitido cazar por seguridad. Por eso, incluso se está solicitando al Gobierno central que meta telas metálicas bajo tierra, para evitar su proliferación en estos puntos de manera muy cruel.
Muchos de estos cazadores cazan con hurones, que meten en las madrigueras. En ocasiones, el hurón mata al conejo atacando al cuello. Otras veces, provoca que los conejos salgan y entonces ellos disparan.
Esta situación no es exclusiva de Épila. Se considera que hay sobrepoblación en zonas de Zaragoza y Huesca y, en menor medida, Teruel. En total, hay 118 municipios que se consideran afectados por esta situación. Por eso, el Gobierno de Aragón aprobó hace unos meses un decreto con medidas extraordinarias y urgentes para controlar la población del conejo, con el que se obliga a los cotos a intensificar la caza de esta especie, sin plantearse en ningún momento el tomar medidas éticas.
La caza deja imágenes desoladoras a su paso. Nunca será la solución. Desde AnimaNaturalis luchamos para su completa abolición.
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