La semana pasada aparecían 34 gamos (una especie de ciervos) entre Esterri d'Àneu y Llavorsí (Cataluña), la noche del 25 de febrero. Los animales fueron disparados a tiros, y se cree que fue desde un vehículo que, durante un trayecto de 18 km, fue disparando a ambos lados de la carretera. Además, se cree que antes de disparar, los autos habrían deslumbrado los gamos con un foco.
Ahora los agentes rurales investigan los hechos como un acto vandálico. En general, si los cazadores buscan un beneficio de los animales, extraen la cabeza y se lo llevan. En este caso sin embargo, no se llevaron nada, ni carne ni piezas.
Según el mayor de fauna de los Agentes Rurales, Xavier Farré, se trata de un recorrido «macabro» sin respeto por los animales ni las personas. Además, añadía que «no se han respetado las normas de caza ni de las zonas de seguridad. Se ha disparado desde vías de comunicación, se ha disparado desde proximidad de núcleos urbanos y casas aisladas, ha habido algunos rasgos que han batido estas zonas. Esto conlleva un peligro muy grave de cara a cualquier peatón ».
Los agentes rurales creen que se trata de una gamberrada de ocio nocturno. También han abierto diligencias penales en el juzgado de Tremp y el autor o autores podrían enfrentarse a penas de multa y prisión. Los agentes rurales piden la colaboración ciudadana y que se llame al 112 en caso de escuchar disparos por la noche o cerca de una carretera.
Desde AnimaNaturalis lo tenemos claro: ¡no a la caza!
Fuente: Tarragona Digital
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